Limpieza
El primer paso para una piel sana y radiante es una limpieza facial profunda.
La limpieza facial es un tratamiento esencial para eliminar las impurezas, células muertas y exceso de grasa en la piel. Al limpiar profundamente los poros, se previene la aparición de acné y otros problemas cutáneos, dejando tu piel fresca y revitalizada.
¿Cómo se realiza la limpieza facial?
Comenzamos con un diagnóstico de la piel para determinar el tipo de tratamiento más adecuado. Luego, procedemos con una limpieza suave utilizando productos específicos para tu tipo de piel. El tratamiento incluye exfoliación, extracción de impurezas, aplicación de mascarilla, y un masaje relajante para estimular la circulación y la regeneración celular.
Este procedimiento no solo mejora la apariencia de la piel, sino que también la prepara para absorber mejor cualquier producto hidratante o tratamiento posterior.
Beneficios de una limpieza facial profesional
Realizar una limpieza facial de manera regular puede ofrecerte varios beneficios, entre los que destacan:
- Piel más suave, limpia y libre de impurezas.
- Prevención de brotes de acné y puntos negros.
- Mejora en la textura y tono de la piel.
- Mayor absorción de productos hidratantes y tratamientos.